Llovía torrencialmente,
en la estancia del Mojón,
como adorando al fogon
estaba tuita la gente,
dijo un viejo de repente,
yo se un cuento que da miedo,
contra el recuerdo no puedo
luchar en esta ocasión.
Y cortando la hilación,
un gaucho se rajo un pedo.
Cuantas veces escuchaste estos versos y te quedaste con ganas de mas. La típica parada de carro de las viejas -«che, paren que hay criaturas». Acá va entero, para el deleite del espectador.
También está la versión en serio que publicamos anteriorente Click Aqui
son unos genios estos pibes. Son ustedes? porque hay uno que me parece que lo conozco. chau sigan asi
Quisira que me pasaran la letra escrita de «estancia el mojon» como la cuenta el chico que acompaña la gitarrra…gracias
Hay una letra similar aca:
http://letras.terra.com.br/raul-lavie/390182/
Los voy a matar!!!!!!!!!!! Muy emocionada llamo a mis viejos y les digo: ENCONTRE LO QUE QUERIAN!!!!!!! LO ENCONTRE!!!!!!! Y LLEGA EL GRAN MOMENTO Y MI VIEJA ME DICE… ESTO NO ES… esto no es, Y ENTRAN A CAGARSE DE RISA, MENOS MAL!!!!!!!!! URUGUAYOS, COMO MI VIEJO, TENIAN QUE SER, JAJAJAJAJA, pero me cago en ustedes! jajajaja
Beso grande, desde este lado del charco!
Beso murguero!
Magda.
Pingback: Llovía torrencialmente en la estancia del Mojón | Red Montevideo
Excelente. Andaba buscando las dos versiones. Ahora quisiera preguntarles si alguien conoce un poema que me recitaba mi abuelo, fallecido allá por el ’62. Los personajes son el gaucho Mariano Pintos y el ingles Guillermo Money y trata de la instalación de los primeros alambres de telegrafo. Creo que es de un poeta gauchesco uruguayo, quizás Tomás Regules .
Digo yo, alguna vez en tu reputa vida, payaste algo ? Tenes nocion de lo que es » ORTIGA » Y NO ORTIVA LARVA !!!!!!!!!! Bueno, y tuviste un par de errores mas, pero en definitiva, muy bueno el que toca la guitarra. SALUDOS
por el cantor consentido de su españa blusa anuente
por el impostor de la musa que musica nuestra suerte
porque hoy sobran malos maridos y testigos de la mente
para palo, el recitado que buscas lo escribi en http://raicesargentinas.blogspot.com/.
Aclaro que lo escribi segun mi memoria, cualquier cosa corrijan por favor
gracias
esta buenisimo hace años vengo bustando eso, no tenes los otros temas? yo los escuche hace años por juan manuel lagar y no lo puedo conceguir
Mi abuela me recitaba siempre esto. Cuantos recuerdos. Gracias. Saludos.
esta bueno la verdad q les doy 10 puntos
llovia torrencilmente en la estancia del mojon como adorando al fogon estaba toda gente dijo un viejo de repente les voy a contar un cuento ahora que el agua y el viento traen a la memoria mia cosas que nadie savia y que yo dire al momento y asi siguio su relato de difuntos y fantasmas brujas y hechiseria cuando de entre los cañaverales se sintio un gemido y no falto un gaucho que dijo sos alma que andas penando no soy antonio que estoy cagando
Llovía torrencialmente,
en la estancia El Mojón,
como adorando el fogón
estaba tuita la gente,
dijo un gaucho de repente
«Yo, se un cuento que da miedo,
contra el ricuerdo no puedo
luchar en esta ocasión…
-córtandole la ilación
un guaso se rajó un pedo.-
Si ése es pa mi, che compadre,
ya que te sentís potro
por que no te rajás otro
pa la cajeta de tu madre-
Pal primero que me ladre
mandinga un facón me dió,
y al gaucho que me cagó
con toda su fuerza bruta
lo mando yo a la reputa
madre que lo paríó.
Bajo un silencio agorero,
le alcanzaron un amargo
que venía como de encargo
pa suavizar el garguero.
Lo tenían al resero,
por ser macho de raigambre,
tuitos los de aquél enjambre
sentaus en troncos de encinas
parecían golondrinas
descansando en un alambre.
Treinta años, quién diría…
dijo el viejo con tristeza…
Yo me rompo la cabeza
por decifrar algún dia
por que misteriosas leyes
que dicen sabios y reyes
que en más de una ocasión
mucho más tira un pezón
que veinte yuntas de güeyes.
A veces pienso que no al cuete
tata Dios que está en el cielo
nos puso un puñau de pelos
en la puerta del ojete,
y ya que en este brete
me metí pido atención,
que si la imaginación
me ayuda en este momento,
conocerán por mi cuento
La leyenda del Cabrón.
Allá en mis tiempos e mozo
y perdonen la distancia,
sucedió que en esta estancia
hubo un crimen misterioso.
Sobre un alazán rasposo,
picante como una hortiga,
un gaucho llamau Artigas
vino a hablar con el patrón
y acá quedó como peón
y lo apodaron «Fatiga».
Y al poco tiempo, nomás,
el amor lo picotió,
y Fatiga se cogió
a la hija del capatáz.
Inocente la torcaza,
fué a buscar agua en el pozo
y como una luz el mozo
le encajó un beso en la jeta
y prendido de una teta
le hizo saltar el carozo.
El 17 de enero,
Pilar, le dijo asustada
«mi gaucho yo estoy preñada,
y ya que los dos nos queremos,
es mejor que nos casemos,
y aquí, no ha pasado nada.
Y aquel gaucho pelotudo,
con la china se casó,
y al poco tiempo nació
un pendejo que pal padre
era igualito a la madre
divino como una aurora.
que como verán en seguida
lo jodió la mal parida
que es lo que les cuento ahora…
Lo bautizaron Pirulo
y felices como ven
el gaucho le hacía el tren,
mientras élla tenía el bebé
él se la daba en el culo..
Una tarde, el hombre rudo,
vió que don Rivas Carmelo
se montaba un zaino en pelo
y disparaba sin motivos
y unos puntos suspensivos
de lloronas en el suelo..
Aguantó el hombre fingiendo
una callada indiferencia,
le dijo Pilar Hortensia
tengo que ir pàl poblao,
voy a llevar un ganau
a la estancia Los Infiernos,
y al besar sus labios tiernos
pensó al verla tan falluta
-Quién diría que esta puta
me está poniendo los cuernos.
Y a la una de la mañana
del otro dia justamente,
valvió el gaucho de repente
convertido en fiera humana,
y viendo desde la ventana
que mientras su criaturita
descansaba en su cunita
entregándose al reposo,
su madre llena de gozo
chupaba una enorme pija.
La mina muerde y araña,
delira, suspira y lucha,
y sale de su cachucha
una baba muy extraña.
El gaucho con feroz saña
penetró en la habitación,
los mató sin dilación
y cuando los vió difuntos,
los enterró a los dos juntos
y en la cruz, puso un condón.
En el pueblo se sabía
que la mina pirobaba
pero ella a nadie contaba
quién era el que la cojía,
por éso la polecía
ni lo molestó al sotreta,
pues se dijo esta coqueta
«no estaba en cajón de cedro»
y con los gauchos del pueblo
se hizo sus buenas minetas.
Ahijuna!!!, gritó el paisano,
Si es verdad lo que habla el viejo
ése era un gaucho canejo…
yo, le besaría las manos…
Yo soy, le gritó el anciano,
venga hijo, abracemé,
que yo fuí el que la maté
a tu madre en San Fernando
porque en la cama culeando
con otro hombre la encontré.
Tata, Tata, perdonemé
si he pasado un mal minuto
pués creyendo que era puto
sin compasión lo cague,
pero piense un poco usted
la mujer para despistar
usa la concha para miar
como la usa pa cojer.
Venga pa acá abracemé
para mi la cola es pecho
dijo el viejo y se abrazaron,
tuitos los gauchos lloraron
cuando el cuento terminó
y el padre al hijó miró
y dijo como a la legua
Se ve que ha sido una yegua
la puta que te paríó
Yo busco uno de este tenor, parecido, mucho más corto y directo.
Algún otro de este tenor cómico.Gracias divinos,desde Argentina.Agradezco a mi e-mail porfa.
Se puede?